viernes, 8 de mayo de 2009

Grandes Mentiras de los Historiadores: El Archaeopteryx

Ay, que te cojo

Cuando acabas el Instituto, es normal dirigirse a tu tutor de clase para preguntarle acerca de carreras que tengan buenas salidas laborales. La primera que suelen recomendarte es Historia; una profesión en la que lo único que tienes que hacer es inventarte pamplinas que nadie te puede cuestionar puesto que tú eres el que tiene una licenciatura. Los buffettes de historiadores suelen estar llenos de gandules que se pasan todo el día en el 20minutos.es y encestando pelotitas de papel en lejanas papeleras. No trabajan. Ni golpe. Es por ello que, cuando alguien les pide una explicación o teoría suelen recurrir a la técnica de inventárselo por el camino.

En 1992 una señora muy atractiva entró en uno de estos buffettes y preguntó a los "trabajadores" que allí encontró una duda que le corroía desde su más tierna infancia; ¿Cómo se dio el paso de dinosaurios a las aves emplumadas? Ni corto ni perezoso, el historiador con más ganas de ligar se inventó una sarta de mentiras intolerables, ya no sólo para llevarse a la dama a la cama, sino también para entrar por la puerta grande en los libros de Historia; la respuesta a su pregunta fue "Gracias al archaeopteryx". Y se quedó tan pantxo.

Esta piedra no demuestra absolutamente nada.

Más tarde se supo que el ligón historiador sacó el nombre tras combinar los dos hobbies que antes le vinieron a la cabeza; el Arkanoid y los tebeos de Asterix. Tras recibir una nominación a los premios Nobel y una cita con la joven del primer párrafo, el caradura escribió una tesis totalmente imaginaria, de nada menos que 4 folios, en las que se inventaba sin pudor los hábitos alimentarios o los cortejos de apareamiento del bicho en cuestión.

Pero nada más lejos de la realidad; el verdadero paso de dinosaurios a animales-no-inventados se produjo por otro motivo; En el siglo XI antes de Cristo todavía no había rastro de los seres humanos sobre la faz de la Tierra (ni por extensión de los demás mamíferos o aves). Fue ese mismo día y no otro en el que un gigantesco meteorito colisionó con lo que hoy correspondería a territorio salmantino arrasando la superficie terrestre y acabando con todo rastro de vida conocida. Ahora sabemos que en el interior del meteorito había un feto humano, que llegó allí supuestamente por una paradoja espacio-temporal demasiado larga como para contarla aquí. Ese feto incubó en la corteza terrestre y germinó, como todos sabemos, en tres sub-especies de seres antropomorfos; los austrolopitecus, los austrohúngaros y los Homo Habilis. No hay por tanto, sitio para fantasías en la Historia de la Evolución.

La mentira surge desde la raiz de la teoría; el Dromeosáurido tampoco existió.

Ya que se había puesto a inventar, el pérfido historiador no se quedó corto. Esta es su definición del animal en sí, incluida en la enciclopedia Espasa no-on line; "El archaeopteryx era el puto amo de su época. Poseía un potente pico provisto de 900 dientes (todos colmillos) con los que desmenuzaba nueces y dinosaurios de tamaño medio. Su visión era periférica y tenía cinco tipos de visiones distintas, entre las que se encontraba la infrarroja y la de rayos-X, utilizando esta última para poder ver la ropa interior de las hembras en pos de elegir una pareja a su gusto. Tenía potentes alas que podían crear tornados de tamáño medio (otra vez) pero ocasionalmente podía usar las 5 plumas de la punta como dedos prensiles, tal y como hace el Pato Donald. Su cuerpo era de titanio y lanzaba púas envenenadas por el pecho. Sus patas poseían enormes garras, con las que elevaba en el aire a triceratops y diplodones para después soltarlos contra una roca y desmenuzarlos con telequinesis. Ponía huevos cada 55 segundos, siendo el 99% de ellos huevos trampa explosivos que acababan con la vida de los carroñeros... ¡por buscones! Sabía al menos 7 idiomas jurásicos y es muy posible que de sus gorgoteos surgiera lo que hoy conocemos como lengua francesa. Sabía de cine y de música, pero no de teatro. En las hembras, el embarazo duraba 4 segundos y la menstruación les veía cada medio minuto. Se organizaban en dos tipos de grupos; en bandadas y en sociedades anónimas cooperativas. Votaban a mano alzada y les encantaba bailar."

Según el estudio, su moneda era el Dolar. El Dolar Archaeopteryx.

Nosotros sólo exponemos los hechos para que sean ustedes los que juzguen esta patraña. Porque, mientras el resto de la comunidad científica acusa a este historiador de "mentiroso", él se defiendo repitiendo continuamente... "verdadoso".

2 comentarios:

  1. wooooooooooooh!!! en verdad les llegava la regla cada medio minuto x3 y cada cuatro parian jajajjajajajajajajajajajajajajjjjjjjaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaajajajjjaja aja ja que fenomenos pero entonses por que se extingueron???

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  2. pucha y ami me gustava este dinopajaro; igual vivio mejor que nosotros

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